domingo, 23 de diciembre de 2007

Carta a Rebeca

A veces me pregunto si alguna noche sueñas conmigo, y si como me pasa a mí, al despertar te encuentras desconcertada y pensando si en ese mismo momento también estás paseando por mi cabeza, aunque sólo sea durante una milésima de segundo. Imagino que no es así, pero me gusta la sensación de que todavía estés tan dentro que a veces ni se note.

Hay meses en los que simplemente no estás, desapareces y me envuelve la rutina, me dedico a hacer cosas cotidianas… y es que desde que mi mecanismo de defensa transformó el olvido en necesidades básicas (comer y dormir) la melancolía y los recuerdos son mucho más llevaderos.

Sin embargo, no soy capaz de que desaparezca esa necesidad de saberte y sentirte sin que ni tan siquiera tú lo sepas, esa esperanza de que el destino cruce de nuevo nuestros caminos, esa absurda convicción de que jamás amaré a nadie como te he amado a ti y de que estamos hechas la una para la otra.

Otras veces me limito simplemente a esperar, sintiéndome culpable de que mi esperanza pueda basarse en tu infelicidad. Esperar a que estés sola y en tu soledad me encuentres sin darte cuenta, sin forzar nada, simplemente que algo de todo aquello que no pudiste quemar encuentre un grieta por donde salir de aquel baúl donde nos encerraste hace años.

Por suerte… o por desgracia, la mayor parte del tiempo soy sólo tu amiga, alguien que ni tan siquiera puede disfrutar de todos los privilegios que conlleva esa palabra por la distancia, pero a la vez, alguien que espero sepas siempre estará cuando la necesites.

Perdóname si en alguna ocasión me distraigo y me olvido de donde estoy y de cual es mi posición en tu mundo; perdóname si te sueño porque al fin y al cabo es como tenerte sin tu permiso; perdóname si te sigo comparando con el resto y yo te perdonaré que siempre ganes; perdóname por todo aquello que no supe darte y que no sabía que tenía; perdóname por seguir buscándote y convertirte en la única convicción en mi vida de que sigue existiendo el amor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Esa tal Rebeca, si existe tiene muchisima suerte de que alguien escriba esas cosas sobre ella.
Sigue con el blog q mola, yo me pasare de vez en cuando. me tienes fija por aki jeje.
un besote

Anónimo dijo...

La verdad es que has plasmado todo lo que siempre hemos querido escuchar de la persona amada...lástima que, de momento, no estéis juntas, seguro que harías todo por y para ella, algo que ella también haría, pues sería una loca si no aprovechara este momento.

Mil besos : Elen