martes, 4 de marzo de 2008

Lo que fue y lo que no será

Supongo que ya es demasiado tarde para muchas cosas, pero intentaré explicarme, creo que en el fondo la razón de todo no es mala, saber que alguien te ha querido hasta la locura y que le dolía el corazón cuando te abrazaba, que se acostaba pensando en ti, para soñarte y volver a levantarse con tu imagen en la cabeza no deja de ser algo bonito, pese a no ser correspondido, porque dentro de lo que cabe lo que he sentido por mi parte ha sido tan real y tan inalcanzable que a veces traspasó el simple dolor y ya no sentía más allá de mis momentos contigo.

Que me enamoré creía que estaba claro, supongo que tú pensarías que tenía ratos de confusión porque yo tampoco te quería hacer pensar lo contrario temiendo que salieses corriendo por no dañarme, por no poderme dar lo que buscaba por el sencillo motivo de que tú no sentías lo mismo y sobre todo porque para ti yo era tu amiga y nunca he dejado de serlo… hasta ahora. Para mí estaba por encima otra clase de sentimientos, siento que haya sido así, no es algo que haya podido controlar.

Cuando eres la tercera en discordia, pese a ser de forma inconsciente, esperas que algo cambie… ¡ya ves! ¡qué tontería! Yo sólo me conformaba con saber que lo que había entre nosotras no era únicamente morbo, atracción, pasar un rato… y claro, ahora me dices que soy y he sido tu amiga en cada momento… creo que es lógico que me pregunte ¿qué ha significado todo esto para ti? ¿qué he sido? ¿qué soy? ¿en qué nos hemos quedado? ¿besos, sexo y… ya?

Me pides que me ponga en tu lugar y lo hago, y puedo entender que te dije cosas muy duras como… amante, que para mí lo que salió esa noche nada tuvo que ver con la amistad. Ahora yo te pido, no que intentes pensar como yo, sino que sigas haciendo de amiga e imagines que esta historia la he vivido con una chica de Madrid a la que conozco desde hace años… ¿qué me dirías si me hubiese pasado esto con otra?

No me sirve de nada a estas alturas decirte cuanto o cómo te he querido… ya no importa, pero supongo que me conocerás lo suficiente como para saber que por mi parte soy perfectamente capaz de “borrar” estos casi dos años y volver al mismo punto amistoso, de que me llames para contarme tus broncas con Santi o las cosas del trabajo, por el momento nada de me gusta fulanito o menganita, por favor, mi autoestima está bastante resentida ahora mismo… pero depende de ti, yo ya no tengo fuerzas.



Me quedo con las ganas de los besos que no te he dado, de las miradas que se escaparon, del recuerdo de las mañanas al otro lado de la cama, de los te quiero que se clavaron entre baños y sábanas, de tus manos en mi espalda, de los gestos que se escondieron de miradas ajenas...

TQM (hoy como amante, a partir de este post como amiga)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vaya, veo que has posteado mucho en muy poco tiempo!. Pues sobre lo de tu amiga, joder, no sabes lo que me recuerda tu historia a la mía, aunque por supuesto, nunca ha pasado nada con ella más allá de la amistad.
Realmente me estoy dando cuenta que hemos compratido experiencias similares. Eso que dices de "dentro de lo que cabe lo que he sentido por mi parte ha sido tan real y tan inalcanzable que a veces traspasó el simple dolor y ya no sentía más allá de mis momentos contigo." Dios, ni te imaginas la de veces que yo he pensado algo así.
Se muy bien lo duro que es comportarse como una amiga con alguien a la que realmente quieres, pero a mi me compensa tenerla como amiga y poder verla muy frecuentemente a no tener nada.

Sobre lo que dices en tu anterior post. Lo de salir del armario, tienes razón con eso de que se necesita un proceso, que no viene de golpe. Yo hasta hace muy poco siempre he pensado que soy bisexual, aunque cada vez voy fijándome más en ellas que en ellos. Simplemente es un proceso de asimilación.

Y sobre lo de Melissa Metheridge, la verdad es que no la conocía, pero ya me estoy bajando algún que otro disquillo en el emule. Jeje.

Bueno guapa, espero no haberte aburrido.

Cuídate y besitos